La carretera convencional es aquella que dispone de un solo carril para cada sentido de circulación. Por lo que supone un alto riesgo al momento de circular por ella. Sin embargo, se permite el libre tránsito de todo tipo de transporte. Desde ciclistas hasta camiones.
Antes de la llegada de otros tipos de carreteras, como autovías y autopistas, las convencionales eran el único tipo de vía que existía.
¿Tú sabes cuál es la velocidad máxima permitida en este tipo de carretera? ¡Aquí te contamos este y otros detalles esenciales!
Carretera convencional: un gran peligro para los conductores
A diferencia de las autovías y autopistas, las carreteras convencionales tienen un trazado. El cual no suele ser tan frecuente como en el resto de carreteras.
Asimismo, en estos tipos de carreteras es usual encontrarse con curvas más cerradas y diversos cambios de declive con visibilidad nula. Por esta razón, el peligro es mayor.
De hecho, en España existe una récord sobre este tipo de vías. Ya que un alto porcentaje de los accidentes, (80% para ser exactos), ocurren en ellas y no en carreteras más transitadas.
Esta cifra es alarmante. Y, por este motivo, se hace hincapié en tener cuidado al transitar por una carretera convencional para evitar desgracias.
¿Por qué es una carretera peligrosa?
Un punto trascendental que convierte a la carretera convencional en peligrosa es la conocida maniobra de adelantamiento. En la cual un vehículo pretende pasar a otro coche invadiendo el carril contrario. Sin considerar que esta acción, ante cualquier distracción, podría ser fatal. Sobre todo, al no tomar las medidas preventivas.
Lo principal para cada conductor, en este caso, es estimar y calcular la distancia necesaria para realizar este movimiento. Tomando en cuenta que, no todos los vehículos que circulan por estos tipos de carreteras son rápidos. Por lo que alguno precisará más recorrido.
Asimismo, es crucial informar tanto al vehículo que llevas adelante como al posterior, mediante el intermitente, que pretendes adelantarte. Por eso, debes mirar por el retrovisor para cerciorarte de que ningún otro coche pretenda hacer lo mismo. Puesto que, podrías obstruir su camino y, en el peor de los casos, generar una situación peligrosa.
Recuerda que, por esta carretera convencional también circula todo tipo de coches, bicicletas y camiones. Por lo que, a la mínima duda, es mejor no adelantar y esperar un mejor escenario para llevar a cabo la maniobra de adelantamiento.
Velocidad máxima permitida en una carretera convencional
La reducción de la velocidad, para estos tipos de carreteras, era uno de los cambios que la DGT venía estudiando desde el año 2018. Siendo aprobada por el Consejo de Ministros con la finalidad de reducir la tasa de siniestralidad.
Ya para el primer trimestre del año 2019, la velocidad máxima permitida en una carretera convencional de más de 1,5 m de orilla, pasó de 100 km/h., a 90 km/h., para vehículos particulares. Con esta nueva velocidad, la DGT espera que se pueda reducir en un 10% los accidentes ocasionados, en gran parte, por descuidos y complicaciones de los conductores.
De igual forma, con esta nueva restricción de margen de velocidad máxima permitida en las carreteras convencionales, España se alineó con otros países de Europa. Como Rumanía, Polonia, Irlanda y Alemania como uno de los 5 países con 90 km/h en vía convencional.
En otros países como Portugal, Bélgica, Italia, Croacia y Francia, quiénes también han aplicado esta medida en vías secundarias, la velocidad es incluso menor. Ya que alcanza los 80 km/h.
Por otro lado, esta disminución de velocidad afectará, en específico, a los conductores de camiones, autobuses y furgonetas. Los cuales podían circular por esta vía a 90 km/h., ahora estos no podrán rebasar los 80 km/h., en ningún caso.
Una medida que se ha extendido por las carreteras españolas
Una vez conocida la velocidad máxima permitida de 90 km/h., para circular por estos tipos de carreteras marcada por la DGT, la normativa se hará extensiva por los 7.000 km de carretera convencional en España. Esto, a través de la sustitución de las señales y marcas viales.
De esta manera, ningún conductor de vehículo particular o carga pesada podrá hacer caso omiso a esta nueva restricción. Cuyo principal propósito es reducir de forma considerable los accidentes causados en estas vías secundarias.
La violación del límite de velocidad acarrea multas y sanciones.
En muchas ocasiones, la carretera convencional funciona como una vía de escape para evitar atascos permanentes en horas picos. Sin embargo, esto no evita que sean consideradas como las más peligrosas, a diferencia de las autovías y autopistas. De allí que se haya implementado esta nueva reforma de circular por ellas a no más de 90 km/h.